La mayoría de los fallecimientos ocurrieron en el sur de Alemania, en los estados de Baviera y Baden-Württemberg.

Más de 40 litros de agua por metro cuadrado cayeron en un período de entre seis y doce horas, según informó el Servicio Alemán de Meteorología de Munich.

En Francia, donde al menos dos personas murieron, llovió en tres días lo que normalmente llueve en seis semanas.

En París, el río Sena alcanzó su nivel más alto en tres décadas.

También hubo víctimas mortales en Bélgica y Rumania y varias localidades en Polonia se vieron afectadas.