SANTO DOMINGO, República Dominicana.-El Departamento Nacional de Investigaciones (DNI) y el Ministerio Público desmantelaron una red de personas que se dedicaban a la compra y trasiego de cobre extraído de cables telefónicos y cables eléctricos robados en distintas zonas del país.

El metal robado y procesado era exportado hacia Haití.

En el operativo fueron apresados los nombrados Héctor Cortes, a quien se señala como el cabecilla de la banda, Héctor Rafael Cortés Francisco (padre del primero) y Domingo Antonio Morfe, señalado como la mano derecha del cabecilla.

Asimismo, fueron apresados Melvin Montero Cortes, Renalito Rafael Colón, Vladimir Peña, José Luis Polanco, Paulino José (de nacionalidad haitiana), Papito Chelz, Alex Calderón, Smith Solano Cruz, Hipolito Chaut y Robinson Cortés. Estos últimos están acusados de procesar el metal robado para facilitar el transporte y su posterior exportación.

“Esta banda realizaba sus operaciones de movimiento y preparación del material robado a altas horas de la noche con la finalidad de facilitar el ocultamiento de sus actividades fraudulentas”

“Esta banda realizaba sus operaciones de movimiento y preparación del material robado a altas horas de la noche con la finalidad de facilitar el ocultamiento de sus actividades fraudulentas”, explica el parte de las autoridades.

Los oficiales superiores pertenecientes a una unidad especializada del DNI junto al Ministerio Público de Santiago incautaron aproximadamente 31 mil libras de cobre producto del ilícito.

De igual forma, ocuparon una camioneta marca Ford Explorer, placa L282090, que sería propiedad del cabecilla de la banda; un camión marca Daihatsu, placa L095498, un camión Mack Renault, sin placa, y un carro marca Honda Accord, color azul.

Tanto los detenidos como el material incautado producto del referido operativo fueron trasladados al palacio de la Policía Nacional, en el antiguo aeropuerto de Santiago.

El robo de cables telefónicos y eléctricos se ha convertido en un problema muy costoso para las comunidades del país dejándolas sin comunicación y a oscuras.

Las empresas telefónicas Claro y Tricom, entre otras, de acuerdo a las denuncias realizadas, han tenido pérdidas millonarias a causa de este delito.