SAN FRANCISCO DE MACORÍS, República Dominicana.- El Consejo Regional de Desarrollo (CRD) clamó imponer de tarea esencial al país un mayor grado de acoplamiento con la confraternidad, el desprendimiento y la paz social, a fin de lograr en sus familias, sus liderazgos y todos sus sectores, columnas que faciliten la erradicación de los males que impactan negativamente al Estado y la sociedad dominicana, por los incorrectos comportamientos engendrados por la crisis de valores junto a  los egoísmos y  sectarismos irracionales.

El organismo de desarrollo quien tiene sus principales ejecutivos a Ysócrates Peña Reyes, José Aníbal García Vargas, Isidro Pichardo Santos, Julio Lavandier y monseñor Jesús María de Jesús Moya, en torno a una urgente concretización dichos lineamientos, sostuvo que debemos aprovechar esta época de navidad y la llegada de un nuevo año, para reflexionar en tal sentido para tomar un mejor rumbo en la paz y el desarrollo que nuestra nación requiere.

En tal respecto, resaltó como objetivo vital, que “debemos entender que así como el egoísmo constituye el peor enemigo de la existencia del amor y la unidad en las parejas y las familias, la práctica del mismo en los estamentos estatales y en nuestras instituciones es improductiva, por sumergir al ser humano en la irracionalidad y los sentimientos infecundos”.

Asimismo señaló que la nación, hoy más que nunca, necesita un examen de conciencia, además, de reflexionar en torno al futuro y las responsabilidades que cada uno debe asumir, “para dotarnos de la sabiduría y el desprendiendo, que faciliten la canalización correcta de los proyectos y metas que urgimos, pro edificar una mejor sociedad dominicana para las presentes y futuras generaciones”.

Añadió que para erradicar los males que afectan al país, hay que propulsar la renovación y transformación que urgimos, “soportándola en la vocación de bien y el bienestar para todos, dentro de un proceso que para ser exitoso,  necesariamente deben participar jóvenes y viejos, pobres y ricos, el campo y la ciudad”.

El CRD, al resaltar el objetivo que propone, finalmente instó a los sectores gobernantes y a todas las entidades, asumir los lineamientos que sugiere, por ser vital el marco de la unión y la confraternidad, “para proveernos de los soportes necesarios, para planificar y reivindicar sobre bases firmes, el progreso y desarrollo que requieren todos los componentes de la  sociedad dominicana”.