SANTO DOMINGO, República Dominicana.-  La Cooperativa de Producción y Servicios Múltiples La Económica (COOPEGAS) rechazó este lunes el arresto de su  gerente general, del presidente del Consejo de Administración,  del gerente de Operaciones y del encargado de la Estación de Gas Coopegas Tamboril La Económica de Licey Al Medi que hace un mes explotó y se incendió dejando un elevado saldo de muertos, heridos y daños a vecinos y a sus propiedades.

A los apresados se les acusa de  negligencia y, en consecuencia, homicidio involuntario por el hecho ocurrido en dicha estación el 3 de octubre, que la empresa tilda de "lamentable accidente" y descarta cualquier tipo de negligencia u omisión.

COOPEGAS considera "improcedentes las medidas emanadas del juez de atención permanente" y alega que "la estación accidentada contaba con todos los permisos de operación y requerimientos de seguridad de las autoridades nacionales y locales, sometiéndose a los parámetros y revisiones necesarias para su correcto funcionamiento".

“El trágico hecho ocurrido en la planta de Licey Al Medio nos ha embargado y causado una profunda tristeza, solidarizándonos con todos los afectados y sus familiares, encontrándonos trabajando diariamente para ofrecer la debida asistencia comunitaria y asumir nuestras responsabilidades", sostiene un comunicado de la empresa.

Declaró que el personal a cargo de la estación "activó los protocolos de emergencia tan pronto tuvo conocimiento de la contingencia".

“Confiamos en que el Poder Judicial obrará acorde a la ley y mientras tanto nuestra entidad continuará trabajando para brindar asistencia a las familias afectadas y mejorando los protocolos de seguridad de todas nuestras operaciones” culminó el documento de la empresa.

GRAVES ACUSACIONES

Se trata de "una empresa disfrazada de cooperativa para evadir impuestos", según la acusación de la Fiscalía, cuyos investigadores apuntaron a que hubo un fallo humano y un fallo mecánico que condujeron a la explosión en la envasadora de gas. Así lo detalló el fiscal titular de Santiago, Francisco Núñez.

El error humano se trata de que la persona que encendió los motores, que es una de las once víctimas mortales, "no tenía la capacidad para hacerlo y provocó una fuga mayor" de gas, dijo Núñez.

La falla mecánica, que también contribuyó al siniestro, fue que no funcionaron ninguna de las tres válvulas de seguridad que son obligatorias en una estación de servicio de gas natural licuado de petróleo (GLP).

El fiscal también apuntó que Coopegas "es la primera cooperativa del país, con más de 20 estaciones de servicios diseminadas por todo el territorio dominicano, pero solo tiene 91 socios".