SANTO DOMINGO, República Dominicana.- Otras farmacéuticas, entre ellas Pfizer, Merck, Biogen, Prana Biotech y Lilly han admitido en el último tiempo que asimismo persisten sus fracasos con sus moléculas contra el alzhéimer, que debe su nombre a Alois Alzheimer quien hace más de un siglo identificó la dolencia por primera vez.
El trabajo que mantiene la farmacéutica Roche se basa en un estudio de los años 80 de una familia colombiana donde padre, abuelo y descendientes integraban un grupo de una decena de parientes con alzhéimer desde edades tempranas, lo que permitió posteriormente identificar el origen genético de ese alzhéimer temprano.
Se busca predecir la enfermedad antes de ser diagnosticada
Esta enfermedad consume regiones del cerebro hasta acabar con la memoria, la identidad y, finalmente, con la vida del afectado.
Es un proceso que arranca con la acumulación de placas de proteínas amiloides en el cerebro, previa a la aparición de ovillos de otra proteína (tau) que destruye las neuronas. Luego, el proceso posterior de inflamación que acaba con todo.
Lo que Roche busca es lograr predecir la enfermedad, porque cuando aparecen sus síntomas y se diagnostica ya son irreversibles los daños en el sistema nervioso.
3 mil hijos de personas con alzhéimer
Adicionalmente, y bajo el mismo principio, Barcelonaβeta Brain Research Center, el instituto de investigación de la Fundación Pasqual Maragall, desarrolla actualmente el llamado “Estudio Alfa”, una investigación que dará seguimiento durante décadas a unos 3 mil hijos de personas con alzhéimer para tratar de encontrar factores de riesgo e indicadores biológicos relacionados.
El diario El País de España, entrevistó al respecto al director del Barcelonaβeta, José Luis Molinuevo, https://elpais.com/elpais/2019/02/06/ciencia/1549480624_668045.html quien “cree que habrá que estudiar la enfermedad desde muchos puntos de vista y que para hacerlo habrá que mejorar la forma en que se hacen los ensayos”.
“La realidad detrás de todo esto es que (el origen) el alzhéimer es sumamente complejo y su inicio se puede precipitar por diferentes situaciones y agentes de riesgo. No es descartable que el equilibrio que existe en el cerebro -donde todos metabolizamos de forma normal la proteína precursora del amiloide- se rompa, entre otros factores, por las infecciones”, continúa. “Pero sería uno de muchos factores que empiezan a producir la enfermedad veinte años antes de que aparezcan los síntomas”, añade.
Molinuevo apuntó a las infecciones porque, efectivamente, en los últimos años se han encontrado relaciones entre el alzhéimer y, por ejemplo, los virus del herpes.
Estudios recientes también han encontrado vínculos entre el alzhéimer e infecciones por hongos, por bacterias que causan infecciones de encías y otras razones y visiones alternativas que plantean que el alzhéimer es una enfermedad similar a la diabetes.
Hay quien también relaciona su aparición con enfermedades cardiovasculares e inmunológicas, recuerda El País.
“El cerebro como órgano es muchísimo más complicado, tiene muchas más células, mayor diversidad celular, una expresión génica más compleja, hay muchas más variables (…); es difícil, pero yo espero que los que vienen después de nosotros se acerquen más a la prevención o a la cura”, dijo hace unos meses al mismo diario madrileño Ramón Gomis, exdirector del Institut d’investigacions Biomèdiques August Pi i Sunyer (IDIBAPS).
Alzheimer hereditario y gestión neuronal del hierro
Una última teoría fue informada en Sídney (Australia) en agosto pasado, cuando se publicó en la revista "Frontiers in Neuroscience" un estudio de la Universidad de Adelaida que sostiene que la degeneración observada en la enfermedad del Alzheimer hereditario podría producirse por problemas en el manejo neuronal del hierro.
"El hierro es esencial para los pequeños centros neurálgicos de nuestras células, las mitocondrias, que generan la mayor parte de la energía que necesitan las células para funcionar", dijo entonces Michael Lardelli, uno de los autores del estudio.
Los investigadores advirtieron que la nueva teoría, que podría ayudar a prevenir esta enfermedad degenerativa del cerebro, no está vinculada a la cantidad de hierro en las dietas de las personas, sino a cómo las células lo gestionan.
Los autores del estudio consideraron que, si bien puede haber una conexión entre el hierro y el Alzheimer, se necesita investigar más la forma en que las mutaciones que causan la enfermedad afecta al hierro celular.
"Los genes mutados en el Alzheimer hereditario parecen afectar a cómo el hierro entra en las neuronas y cómo se recicla dentro de ellas", detalló Lardelli y enfatizó que una alteración en la manera de cómo gestionan el hierro las neuronas, que necesitan una gran cantidad de energía, podría tener consecuencias muy graves a largo plazo.
En síntesis, la mayoría de los científicos cree desde hace más de 20 años que el péptido beta amiloide causa la enfermedad de Alzheimer y su remoción del cerebro puede desacelerar la tasa del declive cognitivo, pero hasta ahora no se ha podido detener el avance de la enfermedad.