Santo Domingo, República Dominicana (EFE).- La junta de vecinos del residencial Sans Soucí, Santo Domingo Este, manifestó su oposición a la construcción de una estación gasolinera en el entorno de ese sector, tras considerar que su operación generará contaminación, además del desasosiego e intranquilidad en un vecindario no apto para este tipo de negocio.

En nombre de la entidad habló el secretario de actas y correspondencia Félix Méndez, quien advirtió tanto a las autoridades de Medio Ambiente y Recursos Naturales como al alcalde de SAnto Domingo Este, Alfredo Martínez, y los concejales de la Sala Capitular de ese cabildo, de los riesgos que representa esa estación de combustibles en las proximidades de un área residencial.

"Nosotros como moradores de este residencial estamos alarmados con la noticia de que se pretende construir una gasolinera en las proximidades del complejo habitacional, justo en la avenida España, por lo que hacemos un llamado a las autoridades tanto de Medio Ambiente, como de la alcaldía de Santo Domingo Este, prestar atención a esta situación, la cual calificamos de alarmante", explicó Méndez en nota de prensa.

El dirigente comunitario declaró que una bomba de combustible próximo a una zona residencial pone en peligro la vida de los habitantes de allí, ya que según explicó no tan solo la contaminación de plomo y sónica, sino además que en cualquier momento puede explotar y morir todos los que habitan cerca de la misma.

Agregó que en las proximidades de donde pretenden instalar la estación de combustibles existen varias instituciones educativas y albergues de niños, lo que representa un verdadero peligro para estos infantes.

En iguales términos se expresó Anny Espinosa quien reside desde hace mucho tiempo en el residencial Sans Souci, quien detalló que el proyecto consistirá en el almacenamiento y venta de combustibles líquidos, por lo que advierte de su peligrosidad.

En tanto que Ramón Sánchez, otro de los comunitarios del residencial, protestó contra la instalación de la estación de combustibles en las proximidades del Acuario Dominicano ya que, aseguró, los habitantes de la zona están opuestos a otro negocio de este tipo ya que existen varios en las proximidades.

"Nosotros creemos que las instituciones estatales y municipales que otorgan estos permisos a las compañías de venta de combustibles deberían otorgarlos dependiendo del clamor de la gente que vive en las proximidades de donde se van a instalar, a un radio de dos kilómetros y medio del residencial tenemos seis bombas de gasolina y 4 plantas de gas licuado de petróleo", detalló Sánchez.

Precisó que nadie quiere que le instalen, de la noche a la mañana, una bomba de gasolina frente a un apartamento donde duermen niños y adultos, con el consiguiente peligro de un incendio, explosión o ser afectado por la contaminación.

Los planes de instalar otra estación de la empresa de combustibles del consorcio Petromovil, cuyo representante es José Aceval Rizek, en plena avenida España, también ha encontrado el rechazo del bloque de juntas de vecinos de la zona.EFE