San Juan, Puerto Rico (EFE).- La Comunidad del Caribe (Caricom) expresó su "profunda preocupación" por la violencia desatada en Haití.
Las protestas violentas que se suceden en Haití durante los últimos días alcanzaron la ciudad de Malpasse (sureste), fronteriza con República Dominicana, donde fueron incendiadas las oficinas aduaneras, mientras se registran asaltos en Cabo Haitiano (norte) y Les Cayes (sur).
La violencia callejera se desató el viernes pasado en Puerto Príncipe cuando el Gobierno anunció que al día siguiente entraría en vigor un fuerte incremento del precio de los combustibles, como parte del paquete de ajustes que firmó en febrero último con el Fondo Monetario Internacional.
En un comunicado, el presidente de la Caricom, Andrew Holness, en nombre de los miembros, agregó que dicho organismo "deplora la perdida de vidas, propiedades y ataques contra infraestructuras" e hizo un llamamiento a la "contención" y a que se "ponga fin a las protestas y la violencia".
"Los temas que han desencadenado las mismas sólo pueden ser solucionados en un ambiente de calma, por lo que en ese sentido, la Comunidad del Caribe da la bienvenida a acciones tendentes a apaciguar la situación".
Por último, subrayó que la comunidad desea que se vuelva "lo antes posible" a la normalidad y, mientras tanto, da la bienvenida al apoyo de las Naciones Unidas para "seguir la situación de cerca". EFE