SANTO DOMINGO, República Dominicana.-El Comité Dominicano de los Derechos Humanos se solidarizó con el reclamo de la familia Martínez Barrientos, cuya hija Wilma Teresa Martínez Barriento se encuentra secuestrada desde el día 8 de julio, hace 1 mes y 2 semanas.
Su madre, Ángela Barrientos, muy compungida apenas puede articular palabra. Lo único que es capaz de decir, entre sollozos, es: “Necesito volver a ver a mi hija… A quien la tenga por favor le pido me la devuelva… Mi corazón de madre no me engaña y mi hija está viva…” Su padre José Martínez, demanda que se interrogue a Crismeldy Guerrero, detenida como sospechosa de ser cómplice del secuestro, ya que las investigaciones policiales indican que ella sabe dónde está Wilma.
El padre además ha sido contactado en tres ocasiones por los secuestradores, los cuales le demandan 2.5 millones de pesos por la libertad de su hija. El padre está dispuesto a negociar con los secuestradores, pero demanda que le pongan a su hija al teléfono para hablar con ella, a lo que continuamente se niegan.
Diógenes Ozuna, presidente del Comité de los Derechos Humanos del distrito municipal San Luis de al provincia Santo Domingo Este, pide que el Procurador General de la República, Radhamés Jiménez designe al Procurador Adjunto Frank Soto al frente de la investigación para dar con el paradero de la empresaria de 27 años, para así agilizar el proceso de su ubicación.
Ozuna califico de “ineficiente” la actuación tanto de la Policía como de la Procuraduría de Higüey, quienes no han sabido dar respuesta satisfactoria a el caso de la joven Martínez Barrientos, y cada día que pasa es una tortura para sus familiares, que no saben a qué atenerse ni dónde más reclamar.