BÁVARO, República Dominicana.- El Consorcio Energético Punta Cana Macao (CEPM) y su subsidiaria la Compańía de Electricidad de Bayahibe (CEB), ambas pertenecientes a la multinacional InterEnergy Group, han anunciado la reducción de un 10 % adicional de la tarifa a sus clientes prepago y pospago de baja tensión, que, en adición a la rebaja del 15 % anunciada en marzo, suma un 25% total, con efecto inmediato.
Esta medida, que beneficiará a más de 150,000 personas, corresponde una decisión proactiva de las empresas en un esfuerzo extraordinario para apoyar a las familias de su zona de concesión en esta grave situación, independientemente de la reducción en el precio del petróleo, considerando la diversa estructura de costos de la tarifa eléctrica.
La decisión se suma al plan de acción que CEPM y CEB han liderado en apoyo a sus clientes durante el periodo de emergencia declarado por el gobierno nacional.
Entre las medidas anunciadas se incluye la suspensión de los cortes automáticos de los clientes prepago de 3.00 PM a las 8.00 AM, para evitar que ningún hogar se quede sin electricidad durante el toque de queda. La energía consumida en ese lapso de tiempo será debitada de la primera recarga efectuada al día siguiente
La compañía promueve además entre sus clientes el uso eficiente de la energía para que los cambios de hábitos durante este periodo no repercutan en la factura, para lo cual pone a su disposición canales de monitorización del consumo a tiempo real, a través de la Oficina Virtual y la CEPM App.
De forma adicional, y entre las iniciativas para apoyar a las comunidades más vulnerables a los efectos de esta crisis, la compañía anunció la donación de energía para el bombeo de agua durante 90 días a áreas de bajos recursos de su zona de concesión, la cual cubre el 100 % del consumo generado procedente de los pozos de agua de estas comunidades durante este periodo, con un impacto a más de 4,000 personas.
A través de su programa Hogar Seguro, inició la pasada semana una campaña de donación de alimentos de primera necesidad, que se extiende de forma semanal durante el periodo de emergencia, con el propósito de alcanzar a más de 500 familias de bajos recursos.