ATLANTA, Estados Unidos.- El Centro de Control de Enfermedades (CDC) publicó que durante la primera mitad del 2013, se reportaron 1,016 casos sospechosos de cólera y 19 muertes relacionadas al padecimiento y mantiene la alerta verde, grado uno, para los visitantes a la isla.

Según observa el CDC (por sus siglas en inglés), durante el año 2012 se reportaron 7860 casos sospechosos de cólera en el Ministerio de Salud Pública y 66 muertes relacionadas a la bacteria Vibrio cholerae, que produce la enfermedad.

De este modo, recomendó a los estadounidenses que visiten República Dominicana, tomar medidas especiales para evitar ser afectados por el cólera, a raíz del brote que ha generado miles de aquejados desde el 2010.

Aunque aclara que la mayoría de los visitantes no se encuentran en riesgo directo de contagio, la entidad le recomienda a sus nacionales, preparar un kit de de salud que contenga antibióticos recetados en caso de diarrea y pastillas para purificar el agua.

Entre las recomendaciones que se suministran a través del portal del CDC, el consumo de agua embotellada y bebidas carbonatadas, utilizar agua libre de impurezas para higienizar los alimentos, cocinar y lavarse los dientes, limpiar las superficies donde se preparan los alimentos con agua y jabón, los cuales deben secarse completamente antes de usar.

También lanzaron una advertencia sobre el uso del agua de grifo, la cual recomiendan sea hervida en caso de que se requiera para el consumo, hirviéndola por lo menos durante un minuto, agregando tabletas purificadoras o productos con cloro.

Finalmente, la institución recomendó a los visitantes estadounidenses limpiar la superficie de los retretes con cloro y prestar cercana atención a la cocción de los alimentos marinos.

Señala que de no haber disponibles productos a base de cloro, el agua puede ser tratada con blanqueador común, agregando ocho gotas por cada galón de agua, lo que es lo mismo a dos gotas de blanqueador por cada litro de agua.

Se recomienda además la higienización de las manos antes de preparar los alimentos o alimentar a los niños, después de usar los baños, limpiar a infantes o después de atender a una persona con diarrea.