La Romana, República Dominicana.- Una calma total rodeaba este miércoles Casa de Campo, urbanización de lujo en La Romana, República Dominicana, donde según medios españoles podría estar el rey emérito Juan Carlos I después de abandonar España.

La presencia de unos pocos periodistas dominicanos, españoles y de agencias internacionales era lo único que alteraba la normalidad en los principales accesos a la urbanización, situada a orillas del mar Caribe, a 125 kilómetros al este de la capital dominicana.

En el acceso principal, ubicado en la carretera que une Santo Domingo y Punta Cana, entraban y salían empleados del complejo en moto, mientras que en la puerta secundaria, cerca del aeropuerto de La Romana, había un mayor trasiego de vehículos.

Los responsables de la urbanización han negado el acceso de la prensa al recinto, para no crear expectativas sobre la presencia del rey, de la que, según puntualizan, no tienen información.

El Gobierno dominicano dijo el martes que no tiene información oficial acerca de Juan Carlos I, mientras que la Dirección General de Migración (DGM) ha negado tener registros de la entrada del padre del rey Felipe VI en el país.

La última vez que Juan Carlos I selló su pasaporte en la República Dominicana fue durante un viaje privado que realizó al país entre el 28 de febrero y el 3 de marzo pasados, según la DGM.

Según medios españoles, el monarca se encontraría en Casa de Campo, urbanización que es propiedad del empresario de origen cubano José Fanjul, quien mantiene una estrecha amistad desde hace varias décadas con Juan Carlos I.

Casa de Campo es un lujoso complejo residencial de 28.000 metros cuadrados con decenas de mansiones, un hotel, tres campos de golf, una marina, pistas de tenis, polo, fútbol y un centro de tiro.

Don Juan Carlos se ha alojado en varias ocasiones en este residencial, donde incluso hay una calle a su nombre, y podría ser, según algunos medios, su refugio tras salir de España por la controversia suscitada por sus presuntos negocios ocultos en Suiza. EFE