WEST PALM BEACH, Florida -. Un prominente médico de la Florida implicado en un escándalo de corrupción en el senador Robert Menéndez está luchando contra las demandas civiles que alegan que inyectó medicamentos contaminados en los ojos de los pacientes, dañando de manera permanente su visión, publicó recientemente Courthouse News Service, de Florida, EE.UU.
Al menos siete supuestos pacientes han presentado demandas contra el Dr. Salomón Melgen en el condado de Palm Beach, alegando que sufrieron infecciones graves en los ojos después de recibir inyecciones de un medicamento cargado de bacterias en los consultorios del Dr. Melgen en el sur de la Florida.
Las demandas alegan que la contaminación bacteriana se deriva de la decisión de Melgen, impulsado por obtener ganancias, de volver a envasar las ampolletas para un solo uso de fármacos oculares, principalmente el producto Lucentis para el tratamiento de la degeneración macular, dice Izzy Kapnick, el autor del artículo.
Según las quejas, Melgen ordenó el reenvasar viales de Lucentis en dosis múltiples, haciendo caso omiso de las instrucciones del fabricante, y desafiando las advertencias de los Centros de Control de Enfermedades a la comunidad médica, que redistribuir el fármaco podría
Melgen y su grupo médico, Vitreo-Retinal Consutants, llevaron a cabo el reenvasado de Lucentis “con ningún otro propósito que no fuera el aumento de sus ganancias”, según Richard Doyle, un abogado de Fort Lauderdale que representa a la mayoría de los demandantes.
Los demandantes padecieron infecciones mientras Melgen los estuvo tratando entre el otoño de 2013 y principios de 2014, alegan las demandas.
El proceso
En abril de 2015, Melgen y Menéndez, un demócrata de Nueva Jersey, fueron acusados por cargos de conspiración, soborno y fraude en servicios honestos relacionados con la presunta obtención de ganancias de Melgen con el Lucentis. Melgen fue sancionado con más de 40 cargos de fraude de atención médica en una acusación aparte.
Los fiscales federales afirman que Melgen estaba obteniendo ingresos “exorbitantes e impropios” mediante el “ordeño” de dosis múltiples de una sola ampolleta de Lucentis y luego facturar a Medicare por cada instancia en que se administró el fármaco.
Melgen y Vitreo-Retinal Consultants facturaron al Medicare US$190 millones y recibieron más de US$105 millones en pagos, muchos de los cuales se obtuvieron a través de la facturación fraudulenta, según los fiscales.
Melgen también está acusado de diagnosticar falsamente a pacientes con degeneración macular húmeda, para poder administrarles a ellos tratamientos con el costoso fármaco Lucentis.
Menéndez, por su parte, está acusado de aceptar regalos exorbitantes y contribuciones de campaña de Melgen a cambio de favores políticos, incluyendo el cabildeo a favor de Melgen en su larga disputa con el Medicare sobre el uso de Lucentis.
A partir de 2009, cuando Melgen recibió una orden de reintegración que le ordenaba reembolsar al gobierno cerca de US$ 9 millones por su facturación excesiva de tratamientos con Lucentis, el senador de Nueva Jersey realizó esfuerzos como compensación para ayudar a Melgen a justificar la manipulación médica, y las acusaciones de corrupción.
En los tres años siguientes, el senador Menéndez se reunió con altos funcionarios de los Centros de Servicios de Medicare y Medicaid (CMS) y abogó a favor de Melgen, mientras todo el tiempo hacía viajes en el avión privado de Melgen e iba de vacaciones a la villa del médico en República Dominicana, según los fiscales.
En un momento dado, Menéndez envió un correo electrónico mediante un miembro de su personal que decía que quería “determinar quién tiene ‘más jugo’ en CMS y el Departamento de Salud”, en relación con la disputa de Melgen con el Medicare.
En el verano de 2012, poco después de que Melgen emitiera un cheque de US$300,000 a un comité de acción política ligada al senador Menéndez, el senador habló con la administradora interina de Medicare y presuntamente trató de convencerla de que Melgen no debía ser sometido al reclamo multimillonario. De acuerdo con el cabildero de Melgen, según los fiscales, el personal del senador había preparado una nota de temas de discusión para la conversación, que dice en parte: "Las directrices [de los Centros para el Control de Enfermedades], si bien son necesarias para garantizar la seguridad del paciente y reducir el número infecciones asociadas a la asistencia sanitaria, no tienen incidencia alguna sobre la política de reembolso del Medicare".
Melgen ha defendido su manejo de las inyecciones de Lucentis sosteniendo que las dosis múltiples eran una práctica común entre los médicos en su campo.
En los alegatos preliminares en los casos civiles de Palm Beach, Melgen culpó de la contaminación a Eastern Pharmacy, una empresa que re-empacó el Lucentis para él. Alegó que los lotes del medicamento se contaminaron accidentalmente en Eastern Pharmacy durante el nuevo proceso de envasado, antes de ser enviado a su oficina para su administración a los pacientes.
Según la FDA (Food and Drug Administración de EE.UU.), Esatern Pharmacy cerró sus operaciones de producción de fármacos estériles en enero de 2014, después de que envíos contaminados por microbios de los fármacos Lucentis y Avastin que habían sido procesados en sus instalaciones fueron vinculados a “acontecimientos adversos” en más de 30 pacientes. La FDA inspeccionó la farmacia y encontró “deficiencias significativas”, incluyendo la incapacidad de usar adecuadamente una campana de flujo y contadores de producción de medicamentos estériles separadas del área de farmacia.
Demandas vigentes
Eastern Pharmacy fue demandada junto con Melgen en un subconjunto de casos civiles en Palm Beach.
A principios de este año, dos de los demandantes, Catherine Hoecherl y Louise Constantino, arreglaron sus reivindicaciones: Constantino llegó a un acuerdo con Eastern Pharmacy, mientras que Hoecherl saldó tanto con Eastern Pharmacy como con Melgen.
Sin embargo, el asegurador de negligencia profesional de Melgen, Heatlhcare Underwriters, sostiene que la farmacia es el único responsable de la contaminación bajo la Ley de Contribución Uniforme de Causantes de Daños.
En una denuncia por subrogación equitativa presentada la semana pasada, Healthcare Underwriters argumentó que Eastern Pharmacy debería proteger a Melgen de la responsabilidad financiera en el caso de Hoecherl a pesar de los acuerdos de transacción.
Al menos, otros cinco demandantes aún tienen reclamos pendientes contra Melgen en Palm Beach County: Helen Pluskot, Mary Katherine Worth, Delphine Metcalf, Sam Belcher y Patricia Curry; todos afirman que su visión se dañó de forma permanente después de recibir inyecciones oculares contaminadas administradas por Melgen y Vitreo-Retinial Consultants.
Informaciones de Courthouse News han estado cubriendo las demandas desde que comenzaron a fluir en el Decimoquinto Circuito Judicial de la Florida en 2014.
Menéndez y Melgen se declararon inocentes en el caso delictivo. Cuatro de los ocho cargos de soborno en contra de ellos fueron desestimados por un juez federal en septiembre pasado.
El abogado de Melgen del sur de la Florida no había respondido a una solicitud de comentarios sobre los casos civiles.