Miami (EE.UU.), 17 jun (EFE).- El juicio contra Pedro Barrientos por el asesinato de Víctor Jara termina hoy su primera semana en Florida (EE.UU.) con testimonios que buscan probar que el exmilitar chileno estaba a cargo de los detenidos en el estadio donde fue asesinado el cantautor y que además se jactaba del arma que utilizó.

Las últimas horas de la jornada de hoy dieron paso a los abogados de la defensa, que anunciaron que el exoficial chileno, quien ya es ciudadano americano, no iba a testificar.

Reiteraron además que Barrientos, que para entonces era un teniente del régimen de Pinochet (1973-1990), no había asesinado ni torturado a Jara, quien además de ser un reconocido músico, era un profesor, director de teatro y activista político.

Desde el lunes pasado, cuando comenzó el juicio, han desfilado por el estrado de una corte federal de Orlando, en el centro de Florida, la viuda y las hijas de Jara, una periodista, alumnos del artista, sobrevivientes de torturas y exmilitares, entre otros.

José Navarrete, uno de los oficiales bajo el mando de Barrientos, señaló que el exmilitar solía jactarse de haber matado a Jara, quien para entonces era un icono de Chile.

Tanto Joan Jara, la viuda del cantante, como sus dos hijas, Manuela Bunster y Amanda Jara, han rendido también testimonio en la corte a cargo del juez Roy Dalton. "Mi vida la partieron en dos", dijo Joan, mientras que Bunster explicó que ellas no fueron las únicas que sufrieron los atropellos militares.

Aseguró que Barrientos "solía comentar que él mató a Víctor Jara, disparándole dos veces". "Siempre mostraba su pistola y decía: 'Con esta maté a Víctor Jara'", agregó.

Otros exmilitares señalaron haber sido testigos de las torturas a los detenidos por parte de oficiales en los vestuarios del entonces denominado Estadio Chile, ahora Estadio Víctor Jara.

Erica Osorio Araya, estudiante de la Universidad Técnica del Estado (UTE), en Santiago, donde enseñaba el cantante, narró que los militares llegaron al aula y lo golpearon con las pistolas y se lo llevaron.

ORLANDO (FL, EE.UU.), 13-06-2016.- El exmilitar chileno Pedro Barrientos llega a la Corte Federal de Justicia en Orlando, Florida hoy, 13 de junio de 2016. Barrientos, de 67 años, comparece hoy ante esta corte federal por los cargos de tortura y asesinato extrajudicial del cantautor Víctor Jara, en 1973. EFE/GERARDO MORA
ORLANDO (FL, EE.UU.), 13-06-2016.- El exmilitar chileno Pedro Barrientos llega a la Corte Federal de Justicia en Orlando, Florida hoy, 13 de junio de 2016. Barrientos, de 67 años, comparece hoy ante esta corte federal por los cargos de tortura y asesinato extrajudicial del cantautor Víctor Jara, en 1973. EFE/GERARDO MORA

Osorio, testigo del asesinato de muchos detenidos, dijo que escuchó cuando golpearon "brutalmente" a Jara, de 40 años.

El Centro de Justicia y Responsabilidad (CJA), que presentó la demanda civil contra Barrientos en 2013, dijo hoy a Efe que Osorio y otros testigos han confirmado durante el juicio que Barrientos, de 67 años, era quien mandaba en el complejo deportivo, además de desempeñar otros deberes.

Jara fue detenido en septiembre de 1973, cinco días después del golpe del general Augusto Pinochet contra el Gobierno de Salvador Allende (1970-1973), y llevado como muchos otros profesores y alumnos al Estadio Chile.

"Este es un caso emblemático por la importancia de Jara como figura cultural, política, como parte del esfuerzo de esos años de crear un país nuevo", explicó a Efe Naomi Roht-Arriaza, profesora de leyes en la Universidad de California en Hastings.

La autora de "El Efecto Pinochet: Justicia transnacional en la era de los Derechos Humanos (2005)" señaló que Jara "fue icónico por lo que hizo en vida y por la forma de su muerte" y que ese reconocimiento facilita la documentación, testimonios y pruebas para la parte acusatoria.

Tanto Joan Jara, la viuda del cantante, como sus dos hijas, Manuela Bunster y Amanda Jara, han rendido también testimonio en la corte a cargo del juez Roy Dalton.

"Mi vida la partieron en dos", dijo Joan, de 88 años y origen británico, mientras que Bunster explicó que ellas no fueron las únicas que sufrieron los atropellos militares.

"Mis compañeros de estudios fueron golpeados también", recordó Bunster.

Por su parte, la periodista chilena Mónica González expresó que ella recuerda un incidente en el que "jóvenes fueron asesinados por escuchar las canciones" del folclorista.

Se prevé que la defensa de Barrientos, de 67 años y quien enfrenta cargos de asesinato extrajudicial y tortura en EE.UU., tendrá dos días para exponer su caso.

Ello dará paso, indicó la CJA, a los argumentos finales de ambas partes y la deliberación del jurado, cuyo veredicto podría darse el próximo miércoles.

La CJA manifestó que se trata del primer juicio por la muerte de Jara, quien fue torturado y acribillado con 44 balazos, que busca además justicia para "los miles de chilenos que sufrieron bajo la brutal dictadura de Pinochet".

Desde 2012, Barrientos y otros siete exoficiales enfrentan en Chile una acusación formal por distintos grados de responsabilidad en la muerte de Jara, por lo que se abrió una solicitud de extradición y se dictó una orden de captura internacional.

El exmilitar se mudó en 1989 a EE.UU. y reside actualmente en Deltona, al norte de Miami. EFE