SANTO DOMINGO, República Dominicana.- El Séptimo Juzgado de la Instrucción del Distrito Nacional aplazó nueva vez este viernes 29 de agosto, la audiencia preliminar contra los imputados de asesinar al destacado periodista Claudio Nasco, ya que el Ministerio Publico aún no entrega el análisis electrónico a los teléfonos de los acusados que ordenó la jueza.
El tribunal reenvió para el 5 de septiembre la audiencia preliminar hasta que la fiscalía deposite el resultado del análisis electrónico de esos números de teléfonos que autorizó la jueza Kenya Romero.
“Es una prueba que consiste en análisis electrónicos, mapificación y rastreo de unos números de teléfono que la fiscalía debe realizar, porque así lo ordenó el Juzgado y la fiscalía no puede desacatar esa decisión”, explicó Plutarco Jaquez, representante de los acusados Oscar Pérez (Yandel), Luis Manuel Estévez Ponciano (Pacuto) y Joel Rafael Miliano Rodríguez (Pateo).
“Es una prueba que consiste en análisis electrónicos, mapificación y rastreo de unos números de teléfono que la fiscalía debe realizar, porque así lo ordenó el Juzgado y la fiscalía no puede desacatar esa decisión”
Según explicó el abogado de los imputados, las pasadas audiencias fueron igualmente aplazadas porque se llevo solo una de las dos pruebas solicitadas por el Tribunal al MP.
“Únicamente se depositó el resultado de análisis electrónico de la pagina que se había hecho y la segunda prueba electrónica que es el análisis a dos números de teléfono, la fiscalía no la ha presentado”, manifestó.
Explicó que el caso se encuentra en la etapa intermedia del proceso judicial, “se concluyó la etapa preparatoria con la acusación de la fiscalía, aunque no quiera porque es así y eso es lo que dice la norma”.
El cadáver del comunicador fue hallado amordazado y con varias heridas de arma blanca, el viernes 13 de diciembre del 2013, en la habitación del motel Chévere, de la autopista 30 de Mayo.
Oscar Pérez (Yandel), Luis Manuel Estévez Ponciano (Macuto o Anderson) y Joel Rafael Miliano Rodríguez (Pateo), de 18, 19 y 20 años, confesaron haber asesinado al comunicador y locutor cubano en la habitación del motel Chévere, y guardan prisión preventiva en la cárcel El 15 de Azua.
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