SANTO DOMINGO, República Dominicana.-Desamparados ante el paso del huracán Irma, dicen estar los moradores de la ribera del río Ozama quienes manifestaron no han sido auxiliados por los autoridades a pesar de las constantes informaciones divulgadas tras la puesta en ejecución de un plan de prevención y contingencia.
“Aquí no ha bajado nadie. Nos va a llevar Irma con todo y casa”, vociferaba Tatica moradora del sector Los Guandules desde hace 50 años.
Tatica vivió el David y el George, ahora le tocará el Irma. Asegura que siempre se han valido por sí mismos, clavando lo más que pueden sus casas y llevándose pertenencias a casas de amigos o familiares que los puedan socorrer.
No todos caben en la escuela o en la iglesia, “y las autoridades no bajan al río”.
“Yo puse bien mis clavos y les agregué un peso al zinc, no quiero que se me vaya mi casa que es lo único que tengo”, manifiesta.
A su lado Ramona grita que no se va de su casa por no dejar sus cosas que ha obtenido con mucho trabajo, pero enviará a los hijos y nietos a casa de su prima que vive en un lugar más seguro.
“Todo se lo roban en estos días. No hay seguridad de dejar solas sus pertenencias y aquí no baja nadie, solo los delincuentes”, agrega.
Ella no tiene suficiente elementos para pasar un ciclón, pero al igual que Tatica ha pasado muchos fenómenos atmosféricos y sabe cómo manejarse antes, durante y después de su paso.
No se va ni que vea a la defensa civil. La vida es muy difícil según su descripción, y nadie les tiende una mano. “Ya estamos acostumbrados a sufrir calamidades, mi hija”.
En tanto en el mismo Distrito Nacional, en el sector Gualey aproximadamente 3 mil familias viven a orillas del Ozama y a pocos los comenzaron a mover a las 6 de la tarde del pasado miércoles 6 a horas de la entrada de Irma al país.
“Los mismos comunitarios hemos tenido que unirnos y acudir al Ayuntamiento del Distrito donde nos reunimos con el alcalde, y hemos quedado en llevar las más personas posibles a las iglesias y escuelas”, destaca Eduardo Féliz.
Féliz resalta que a pesar de que han recibido auxilio del ayuntamiento, los miembros de las instituciones encargadas del tema de prevención y mitigación ante estos casos no se han presentado en la zon.
“Ni COE ni Defensa Civil ha venido por aquí, no hemos recibido botiquines ni nos han proveído de nada para el cuidado ante el paso del huracán”, añade.
Calles arriba Juan Carlos Medina dice que Gualey está compuesto por 15 coordinaciones vecinales, por la extensión de sus sub barrios y todos han trabajado en ayuda de la comunidad a manos peladas.
Califica como un aparataje mediático, las reuniones y constantes ruedas de prensas que han llevado a cabo las autoridades. “Eso no se ha visto por aquí, son muy pocos los albergues y no son todos los que van a allá”.
Señala que durante el paso de dichos fenómenos naturales, son los que más sufren porque deben volver a levantar sus moradas de esos materiales frágiles con los cuales han podido resguardarse al Sol y la lluvia.