SANTO DOMINGO, República Dominicana.- El  escritor Andrés L. Mateo, pidió a la fiscal del Distrito Nacional, Yeni Berenice Reinoso, romper el acuerdo arribado por la fiscalía con el comerciante y dirigente reformista José Del Carmen Cruz, acusado y condenado por falsificar medicamentos.

L. Mateo, entiende que el crimen de que se acusa al comerciante José Del Carmen Cruz es de tal magnitud que como “representante del pueblo”, la fiscal debería pensar en los efectos devastadoras que su decisión produce.

El acuerdo arribado por la fiscalía, el Ministerio de Salud y el acusado concede la libertad bajo determinadas condiciones que contemplan un arresto domiciliario, impedimento de realizar actividades empresariales durante 10 años que estén ligadas a la salud y la “condonación” de la deuda que tenía con sus empresas Salud Pública.

Lea íntegra las declaraciones de Andrés L. Mateo

Yeni Berenice Reinoso
Fiscal del Distrito Nacional.

Distinguida Fiscal del Distrito:

La decisión de darle libertad al comerciante y dirigente reformista José Del Carmen Cruz por la vía de un acuerdo con esa Fiscalía, nos ha sorprendido grandemente. Es cierto que la ampara un marco de “legalidad” puesto que la firma de estos acuerdos forma parte de sus funciones; pero el crimen de que se acusa al comerciante José Del Carmen Cruz es de tal magnitud que como “representante del pueblo” debería usted pensar en los efectos devastadoras que su decisión produce. Durante muchos años este señor vendió medicinas falsificadas al Ministerio de Salud pública, llegando a acumular una enorme fortuna. La inmensa mayoría de los medicamentos falsos que él producía eran consumidos por los pobres de éste país que acuden a los hospitales públicos. ¿Puede una autoridad responsable medir las consecuencias mortales de semejante conducta? ¿Cuántos infelices dominicanos fueron a parar al cementerio producto de la ambición y la falta de escrúpulos de un maleante disfrazado de empresario? ¿No es éste, en rigor, un crimen de lesa humanidad?
La costra que nos han tejido los “líderes” políticos que han manejado el poder en nuestro país, nos ha arrojado sobre un conformismo criminal. La sociedad debería estar estremecida, ése acuerdo construye una imagen enteramente brutal: la del canalla perfecto. Sus actos no son sino epifenómenos de una sociedad hundida en la disolución moral. ¿Cree usted que cien millones de pesos confiscados de su enorme fortuna, pagan a la sociedad una cifra de muertos que nadie sabe cuántos son? ¿Por qué en Moca se venden productos farmacéuticos vencidos y falsificados ante la vista de todo el mundo, y no hay una autoridad que ponga fin a esa actividad criminal?
Le pido en nombre de la ciudadanía deshacer ése acuerdo. Las sociedades funcionan imitando sus paradigmas exitosos. Otros vendrán entonces que harán lo mismo, invocando la benevolencia de la autoridad o el favor político. Este país lo que espera de sus autoridades es un régimen de consecuencias verdadero, y sobre todo, proporcional al hecho juzgado. Usted tiene una obligación ética como funcionaria, y ya desde la “Ética a Nicómaco”, veinte siglos atrás, la responsabilidad ética consiste en “la obligación de atender a los deberes que los seres humanos tenemos hacia el resto de los seres humanos”.

Atentamente,

Dr. Andrés L. Mateo.