GAZA.- Un alto funcionario militar israelí dijo el miércoles que una invasión terrestre de la Franja de Gaza ahora parece cada vez más probable, ya que Israel intensificó los ataques aéreos contra el enclave costero, concentrándose en las casas de varios altos dirigentes políticos de Hamas y de la muerte de cuatro jóvenes en una playa.
En otra posible señal de sus intenciones, Israel instó a decenas de miles de palestinos de Gaza a evacuar las zonas fronterizas, según un reportaje del periódico estadounidense The Washngton Post, firmado por William Booth, Sudarsan Raghavan y Ruth Eglash.
Miembros del grupo militante palestino Hamas, que controla la Franja de Gaza, dispararon más cohetes contra el sur y el centro de Israel, incluyendo Tel Aviv, la capital comercial del país, a unos 45 kilómetros al norte de la frontera de Gaza.
Entre las últimas víctimas están cuatro niños palestinos, todos menores de 12 años, quienes fueron asesinados por un misil o proyectil israelí mientras juega en una playa de Gaza cerca de un hotel utilizado por los periodistas extranjeros, de acuerdo con testigos y funcionarios palestinos. Los cuatro chicos eran primos. Otras siete personas, adultos y niños, se reportaron heridos en el ataque.
“Hamas decidió seguir luchando y va a pagar el precio de esa decisión”, dijo Netanyahu en un discurso televisado la noche del martes. “Cuando no hay un alto el fuego, nuestra respuesta es el fuego”
En Tel Aviv, un oficial militar israelí de alto rango el miércoles dijo que existe “una posibilidad muy alta de una operación terrestre” en Gaza, y agregó que “si se quiere luchar eficazmente contra el terrorismo, es necesario tener las botas puestas en el terreno”.
El funcionario, que habló a un grupo de periodistas internacionales a condición de guardar el anonimato, según las normas militares de tierra, dijo que una operación de este tipo no sería un reto importante y podría ser logrado en cuestión de días o semanas. Pero también advirtió que una incursión en Gaza es casi seguro que conduzca a mayores daños y víctimas. Aún así, la campaña aérea de parte de Israel tiene sus “límites”, dijo, y la opción de una ofensiva terrestre crece a medida que continúa el conflicto.
“Cada día que pasa hace esa posibilidad más evidente”, dijo el oficial.
Los nuevos ataques se produjeron un día después de que los planes para una tregua se vinieron abajo, elevando la amenaza de un conflicto más amplio. Fue el primer intento significativo para poner fin a más de una semana de fuego durante todo el día entre Israel y Hamas, y terminó antes de haber comenzado.
El desenlace de una propuesta de alto al fuego de Egipto ofreció pocas esperanzas inmediatas de una solución diplomática a un conflicto que ha dejado al menos 204 muertos palestinos en Gaza y que cobró su primera víctima mortal israelí martes.
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, dio la autorización militar para usar “toda su fuerza” contra los militantes en Gaza y prometió que Hamas y sus aliados sufrieran por su decisión de no detener el fuego de cohetes hacia Israel.
“Hamas decidió seguir luchando y va a pagar el precio de esa decisión”, dijo Netanyahu en un discurso televisado la noche del martes. “Cuando no hay un alto el fuego, nuestra respuesta es el fuego”.
Por la mañana del miércoles, Israel había atacado al menos 75 objetivos dentro de Gaza, incluyendo las casas de los cuatro altos dirigentes de Hamas. El Ministerio del Interior de Gaza dijo que al menos 30 casas fueron golpeadas.
Militantes de Hamas dispararon al menos 13 cohetes contra el sur de Israel, siete de los cuales fueron interceptados por el sistema de defensa aérea Cúpula de Hierro de Israel, de acuerdo con los voceros israelíes.
Entre los oficiales de Hamas que constituyen objetivos se incluye a Mahmoud al-Zahar, quien desempeñó un papel prominente en la toma de posesión de Gaza en 2007 por el grupo militante islamista. Zahar es uno de los fundadores de Hamas, un exministro de Relaciones Exteriores, de línea dura abierta, que daría entrevistas a los periodistas en su jardín delantero y se burlaría de lo que ya llamó “las ilusiones de un proceso de paz” con Israel.