La calle El Conde, Santo Domingo, capital de la República Dominicana

La calle El Conde , es sin lugar a duda una de las más emblemáticas vías de la zona Colonial, y por supuesto de Santo Domingo. La otrora calle del Clavijo, luego calle Separación y llamada como hoy ostenta su nombre, en honor al Conde de Peñalba, figura clave en la defensa de la ciudad de las invasiones inglesas de los años 1600, fue escenario de encuentros sociales durante varias épocas.

Su morfología fue evolucionando a través del tiempo, convirtiéndose de una calle residencial y de conectividad con una de las entradas de la ciudad amurallada hacia la principal Plaza Urbana conformada por la contigua a la Catedral Primada de América , hoy Parque Colón, hasta lo que es hoy: un espacio público con características de plaza abierta desde antes de su peatonización hasta nuestros días.

El deterioro que ha ido padeciendo hace varios años la hace punto clave de una inminente intervención por parte de las autoridades gubernamentales que tienen a su cargo la revalorización de la Zona Colonial.

En el informe Programa Integral De Desarrollo Turístico y Urbano De La Ciudad Colonial de Santo Domingo, elaborado por el Ministerio de Turismo y el Banco Interamericano de Desarrollo ( BID) y tal como aparece en la web como https://ewsdata.rightsindevelopment.org/files/documents/84/IADB-DR-L1084_ecYaAxh.pdf se prevee la intervención de este importante enclave que , tal como mencionaramos en otros artículos , es la columna vertebral de la zona, dada la multiplicidad de actividades tanto comerciales, recreativas , turísticas , y de carácter cultural que allí convergen.

Este informe es solo una guía de acción y pautas a seguir, pero no por esto deja de ser importantísimo, fundamental y certero para un futuro prominente de la ciudad intramuros.

Sin embargo, se ve compelido a un reforzamiento y definición de los conceptos expuestos en varios de sus acápites. Estos van desde que sería lo ideal que se establezca en la Calle El Conde, hasta una redefinición de las zonas edificables de estacionamientos a manera equidistante, hasta la configuración de un mayor alcance y definición de los aspectos viales y otros temas relativos a los sub-enclaves culturales existentes de zonas como Santa Bárbara y San Antón, su potencial de desarrollo, y las propuestas espaciales de los mismos.

En el extremo oriental de la calle, tenemos un gran polo conformado por la Terminal de Don Diego , que con la llegada de cruceros turísticos irán confiriéndole mayor movimiento a la zona , incrementándose en número y en calidad de ocupantes con mayor poder adquisitivo.

Este importante lugar de arrivo está interconectado con la Calle El Conde a través de las escalinatas, mismas que en horario nocturno pudiesen utilizarse tal como se hizo en años anteriores como anfiteatro para conciertos de jazz , clásicos, y representaciones teatrales ligeras.

Inmediatamente a esta, tenemos una Zona Hotelera importante, constituída por el Hostal Nicolás de Ovando, seguido de un Centro Cultural de la Casa de Francia, al mismo tiempo sede diplomática de la legación francesa, así como varios restaurantes, los cuales se han mantenido en un ambiente bien pintoresco con imágenes y características similares a las pinturas de los impresionistas del siglo XIX.

El Colegio de Artistas Plásticos en el centro de la cuadra, cuyo patio interior esta ocupado por el Visual Café, que además de ser un oasis y un lugar mágico en la estructuración de sus espacios, ha catapultado la curiosidad por las obras expuestas en sus salas de exhibiciones, incrementando cada día el número de personas de todas las edades, clases sociales y condiciones de los que la visitan, en un claro impacto cultural para el acervo de las nuevas generaciones.

Luego de esta sala-recibidor del visitante externo que es este segmento del Conde, ocurre la gran explosión espacial urbana , constituída por el Parque Colón con variopintas actividades que lo mantienen en constante ebullición,incluyendo no menos importantes ofertas gastronómicas al aire libre.

Cruzando las antiguas calle del Comercio ( hoy Isabel La Católica ) y la de Los Plateros ( hoy Arzobispo Meriño) , nos internamos en los sucesivos bloques fractales de la calle del Conde de Peñalba, cargadas de fascinantes historias y múltiples anécdotas.

La idea que, traducida a concepto y, que entendemos mas adecuada para el desarrollo de estos espacios urbanos es la de preservación y consolidación de sus fachadas existentes, representativas de diferentes épocas , tal como dice el informe de MITUR-BID, antes mencionado, pero haciendo un uso más libre y vanguardista del diseño de pavimento, con características de fácil mantenimiento, una disposición sectorizada del mobiliario urbano, igualmente muy moderno y con transparencia y ligereza , con vegetación profusa , abierta, agradable, con sombras diurnas e iluminacion led nocturna, y sistemas de aspersores, a manera de microclima, para mantener fresca la zona. Esto, por supuesto con un sistema de seguridad con cámaras y centro de controles.

Ademas de incluir un conjunto de velarias de color blanco, con gama de opacidades, dejando pasar en mayor o menor grado los efectos de la luz solar diurna,ya en horas de la noche, desde el ocaso, se propone un sistema de iluminación indirecta tipo led, con el objetivo de que se produzcan unos efectos cuasi alucinantes, capaces de atraer un blanco de público para utilizar estos espacios orientados al desarrollo de muestras de ritmos y bailes autóctonos, actividades de micro-teatro, cafés al aire libre, proyecciones de cortosmetrajes de nuestra cultura, así como mercados de artesanía enfocados a un segmento de turismo de amplio espectro.

Todo este conjunto con la ampliación de las aceras de la calle Palo Hincado y un posible re-confinamiento del Parque Independencia de manera que se pueda abrir más sus fronteras para e integrarlo de manera eficiente al conjunto.

Esto se constituiría en una aventura perceptual sin precedentes ,que motivaría y atraería a todo visitante externo de quienes cuyas ideas se circunscriben a la creencia de que la República Dominicana solo es el Este del país, involucrándolo en la historia, en la cultura, en la gastronomía y en el arte, un potencial enorme que nos regala la Zona Colonial para la obtención de un Turismo Cultural de altura y calidad con relación a las ciudades más importantes del área y del mundo.