SANTO DOMINGO, República Dominicana.-El 14 de febrero de este año se informó desde Washington que el gobierno de Estados Unidos redujo “drásticamente” su ayuda a América Latina para el combate al narcotráfico, de US$352 millones a sólo US$85 millones, según reportó la agencia de noticias EFE.
Cuatro meses después, el 8 de junio, la senadora demócrata de Misuri, Claire McCaskill, presidenta del subcomité de Supervisión de Contratos del Senado de EE.UU, declaró: "Está cada vez más claro que han fracaso nuestros esfuerzos para combatir el tráfico de drogas en América Latina, especialmente en lo que se refiere al uso de contratistas".
La legisladora hacía referencia a un informe sumamente crítico que cuestionaba a dónde habían ido a parar más de 3,000 millones de dólares que el gobierno de EE.UU había destinado a la cooperación con América Latina en la lucha contra el narcotráfico desde el año 2005.
¿Y qué ha ocurrido en la República Dominicana?
Mientras la Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD) y otros organismos militares y policiales apresan todos los días micro y grandes traficantes de drogas, los escándalos por los agentes y militares que se venden a los grupos que controlan este negocio criminal no cesan.
En los último 18 meses, más de 130 militares y policías entrenados en el combate al tráfico de drogas, que prestaban servicios en los principales aeropuertos del país, fueron apresados y dados de baja o sometidos a la justicia por vincularse a los traficantes de drogas nacionales e internacionales.
Estos militares y policías fueron acusados de prestarse a proteger cargas de drogas o a participar directamente en el trasiego con destino a Estados Unidos y la Unión Europea, aprovechando la facilidad que tenían para movilizarse por distintas áreas de los aeropuertos.
“Los oficiales garantizaban al narcotráfico la protección y abordaje de los alijos de drogas que serían enviados en aviones comerciales con destino a EE.UU. y a la UE evadiendo los controles establecidos por ellos mismos”
Según datos obtenidos por Acento. com.do en fuentes de los organismos de seguridad del Estado Dominicano, entre los cancelados figuran coroneles, mayores, capitanes, tenientes y militares de rangos menores, que trabajaban como agentes antinarcóticos y de seguridad en los aeropuertos Internacional de las Américas, en Santo Domingo Este; Internacional Punta Cana, en La Altagracia; Internacional Gregorio Luperón, en Puerto Plata, y el Internacional Cibao, en Santiago.
Según los informes de la investigación los militares y policías “durante años estuvieron enrolados en una estructura criminal al servicio del narcotráfico”.
Los militares y policías involucrados en los casos descubiertos movilizaron en menos de dos años 493 kilos de cocaína y heroína, además de drogas menos duras, como la mariguana y el extasis. La mayoría de los oficiales y no oficiales involucrados en este delito respondía a coroneles del Cuerpo Especializado en Seguridad Aeroportuaria (CESA) y de la Dilección Nacional de Control de Drogas (DNCD).
“Los oficiales garantizaban al narcotráfico la protección y abordaje de los alijos de drogas que serían enviados en aviones comerciales con destino a EE.UU. y a la UE evadiendo los controles establecidos por ellos mismos”, reza una parte del informe obtenido por Acento.com.do.
Recuerda que el 7 de junio de 2010 se recomendó la cancelación de dos agentes porque permitieron que la señora Seferina Luzón Santiago sacara del país 668.2 gramos de heroína, droga que posteriormente fue incautada en el aeropuerto John F. Kennedy, de Nueva York. Los nombres no fueron dados a la opinión pública.
Resalta que sólo en septiembre del 2010 fueron expulsados 20 militares, acusados de permitir que salieran desde el aeropuerto Cibao de Santiago 108 kilos de cocaína en un vuelo comercial. Este cargamento fue descubierto y confiscado por las autoridades de Miami en el aeropuerto Fort Lauder.
En ese mismo mes se produjo el apresamiento y baja de un agente de seguridad en el aeropuerto Las Américas, presuntamente sorprendido guardando en su archivo personal un bulto con 47 paquetes de cocaína que había sido transportado en un vuelo de procedente de Newark, New Jersey (EE.UU). El informe no detalla la suerte corrida por ese agente ni revela su nombre.
Asimismo, en febrero del 2011 fueron dados de baja un teniente coronel y cuatro tenientes, junto a 12 alistados, todos adscritos a la Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD), bajo la acusación de estar vinculados a una red de narcotráfico que heroína y cocaína a Puerto Rico a través del Aeropuerto Internacional de las Américas. (AILA).
Casos más notables
Los casos más notables en el período examinado, y en los cuales se han revelado los nombres de los involucrados, han sido los siguientes:
El teniente coronel Efrén Varela Sosa, de la Fuerza Aérea Dominicana (FAD); los primeros tenientes Danilo Ginebra Simone, del Ejército; y Carmelo Laureano Contreras, de la FAD; así como los segundos tenientes Biolenny López Pérez y Wilfredo A. López Segura, también de la FAD, fueron apresados bajo la acusación de estar vinculados a una red criminal que el 2 de diciembre de 2010 trató de enviar un alijo de 145 kilos con 90 gramos de cocaína y 2 kilos de 3 gramos de heroína a Puerto Rico.
Mientras que en abril del 2011, un grupo de12 militares, entre ellos un capitán y un teniente coronel asignado al Aeropuerto Gregorio Luperón, fueron acusados de intentar trasegar 33 kilos de cocaína con destino a Canadá. La droga la habrían introducido en la maleta de un niño. Por este caso fueron dados de baja y sometidos a la jusitcia el coronel Ramón A. Vásquez Díaz y el capitán Genetti Moronta, y los primeros tenientes Franskimy Moreno Salcedo y Randy Francisco Grullón Puente, los primeros tres del Ejército y el último de la Fuerza Aérea Dominicana.
En ese mismo grupo también fueron dados de baja y sometidos los sargentos mayores Duarte Simón Pierre, del Ejército; Gerardo Santana de los Santos, Joan Manuel Vargas Lugo, Beltrán Espino Green, de la FAD, a demás los rasos Randy Frías Victoria, del Ejército; el asimilado Alexis Otaño Jiménez, asignado al CESA, y los agentes antidrogas Moisés Ortiz Díaz, Jesús A. Rozón Polimé y Leonardo Monegro García, los tres de la DNCD.
En enero de 2011 fueron cancelados tres agentes antidrogas en el aeropuerto Las Américas, bajo la acusación de complicidad para permitir el ciudadano Ángel Matos Caraballo traficara 6 paquetes de cocaína con destino a la ciudad de Nueva York.
No es un problema exclusivo de RD
La corrupción que envuelve a los cuerpos militares y policiales encargados de perseguir el tráfico de drogas, tanto a nivel de las grandes redes internacionales como de los microtraficantes que operan en los barrios, no es un problema exclusivo de República Dominicana.
Los escándalos de agentes antidrogas y de funcionarios civiles que han terminado seducidos por el dinero de los capos afectan tanto a Estados Unidos como América Latina, y a países de la Unión Europea, Asia y África.
Por esta razón, personalidades tan importantes como el conservador republicano George Shultz, ex secretario de Estado del gobierno de Donald Reagan, que fue la que comenzó la denominada guerra contra las drogas, y el premio Nobel de Economía, Milton Friedman, han planteado que se revise a nivel internacional la forma en que se ha abordado este problema, llegando incluso a sugerir la despenalización del consumo de drogas.
De igual manera han opinado los escritores Premio Nobel Mario Vargas Llosa y Gabriel García Márquez, y el no menos destacado Carlos Fuentes, que plantea que se comience a debatir la posibilidad de legalizar el consumo, para eliminar el narcotráfico con todas sus secuelas de muerte y corrupción, al tiempo que se brinda ayuda médica y sicológica para recuperar a los adictos.
Asimismo, los expresidentes Ernesto Zedillo, de México; César Gaviria, de Colombia, y Fernando Henrique Cardoso, de Brasil, miembros de la Comisión Global de Políticas Sobre Drogas, de la ONU, advierten que después de 50 años de la primera Convención de las Naciones Unidas sobre el Tráfico de Drogas, esta guerra ha fracasado.
Todos coinciden en que la adicción es un serio problema de salud pública, no de represión. Y por tanto recomiendan mayores esfuerzos en la educación para evitar el consumo, al tiempo que se debe brindar el tratamiento adecuado para la recuperación de los adictos.
Informe Mundial sobre Drogas
El Informe Mundial sobre las Drogas, publicado este jueves, 23 de junio, por la Oficina de Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (ONUDD), establece que entre 149 y 272 millones de personas han consumido alguna droga en el último año en el mundo, mientras que se estima que unas 200.000 mueren anualmente por enfermedades relacionadas con los narcóticos.
El cultivo mundial de hoja de coca se redujo en 2010 un 6% gracias al descenso de los plantíos en Colombia, aunque la fabricación de cocaína se mantuvo estable y su mercado mueve unos 85.000 millones de dólares.
En el mundo se plantaron 149.000 hectáreas de hoja de coca, lo que se tradujo en entre 786 y 1.054 toneladas métricas de cocaína, un rango de cifras parecido al de los últimos años.