SANTO DOMINGO, República Dominicana.- El presidente electo de Ecuador, Rafael Correa, compartió en un almuerzo con los jueces titulares del Tribunal Superior Electoral (TSE), Mabel Féliz Báez y José Manuel Hernández Peguero, quienes formaron parte del grupo de observacdores internacionales de la pasada contienda electoral.
En un almuerzo donde participaron invitados especiales y observadores electorales, los magistrados conversaron con el mandatario ecuatoriano, quien manifestó su admiración por la República Dominicana.
Correa recordó la Cumbre del Grupo de Río que se efectúo en Santo Domingo, en marzo del 2008, en donde el entonces presidente Leonel Fernández solicitó un apretón de manos entre Correa y el presidente colombiano Álvaro Uribe Vélez, para terminar con las diferencias que surgieron en el momento.
De igual manera, los jueces electorales dominicanos, sostuvieron un desayuno con el canciller ecuatoriano, Ricardo Patiño, quien agradeció la cooperación del país a Ecuador, que a través de la Junta Central Electoral (JCE) brindó asistencia técnica y logística en materia de cómputo electoral al Consejo Nacional Electoral de Ecuador (CNE).
Tanto Féliz Báez como Hernández Peguero observaron las elecciones presidenciales en cuatro colegios electorales en Quito, donde había más de 150 mesas electorales, allí realizaron una labor de inspección junto a otros observadores de diversos países.
“Solo bastaba con mostrar el carné de observador y nos daban todas las informaciones requeridas, además conversábamos con los votantes y fueron muy receptivos”, comentó Féliz Báez.
A diferencia de las elecciones dominicanas, según narraron lso jueces en Ecuador en las calles no se observa la tensión por el proceso electoral, la gente acude a las urnas e inmediatamente se va a sus hogares y no se queda celebrando en la vía pública cuando están dando los primeros resultados.
Durante las pasadas elecciones presidenciales de Ecuador participaron como observadores la Organización de Estados Americanos (OEA), la Asociación de Naciones del Sureste Asiático (ASEAN), la Unión Africana y la Liga Árabe, entre otras entidades, que desplegaron unos 320 observadores internacionales.