Que hayan olvidado toda su obra literaria se comprende; que hayan olvidado “Dictadura con Respaldo Popular” y “De Cristóbal Colón a Fidel Castro” es obvio; que hayan olvidado su ejemplo de honestidad es evidente; que hayan olvidado su entereza ideológica y su integridad ética es innegable…Pero que hayan olvidado que Juan Bosch era partidario del trabajo que dignifica al ser humano, y no del vicio que lo aliena y envilece, es sencillamente imperdonable para quien sea que evoque ocasionalmente su nombre (sea que pida o no permiso a la familia para usar su figura en un vulgar billete de lotería).