La Iglesia nos ha llevado a tal grado de confusión social que al ano de un embajador lo ha convertido en noticia, negando que nuestra Constitución dice que: El uso correcto del recto es cuestión personal y no del debate obispal que en todo se mete y opina.
Convertido en noticia, por la gracia de una Iglesia-política donde, ha decir de los hechos, el uso de sus rectos no ha sido de lo más correcto… desde el escándalo aquel que llegó de Higüey a Juncalito.
Todo, por la llegada de un embajador americano que mira con su ojo por los “Derechos del Recto”, a quien el obispo Cedano, por encargo de un Cardenal hermano que anhela ser jefe de Estado, se niega a otorgarle el porqué le fiscaliza el ano.
Sin embargo, el embajador quedará admirado pues, los clericales de aquí, “meticulosos” al fin, no más reparten las hostias salen de las capillas con su monaguillo en mano.
Qué lo explique el Obispo Cedano y su compadre el cardenal ¿De dónde vino esta maña clerical? ¿Cuándo y dónde aprendieron los curas de aquí tan avanzada ciencia culinaria? ¿Con los hermanos Pinzón? ¿Acaso desconocen que Jesús fue “ensartado por el costado” y no por la retaguardia? ¿Acaso no saben que si les dan galleta deben poner la otra mejilla pero jamás la rejilla?
De dónde sacaron estos curas semejantes artimañas/ si les dice el cura Cedano/ que no es cosa de cristianos/ querer con suma alegría/ ceder con frecuencia el ano
En cuanto a nosotros, estamos claros: quienes quieran sacrificar su tabernáculo que lo hagan, pero con fe, que le pidan a Dios que se lo rompan bien, que se lo partan en trocitos; es su derecho señores, es su gusto exquisito; pero eso sí, que no utilicen su fe para depredar jovencitos.
Temen los curas de aquí que la sola presencia de este adalid de los “Derechos del Recto” pondría en la “agenda nacional” el tema de los pedófilos…a los que ciertamente desprecia este embajador moralista . A diferencia del clero, solo tiene una cara: suficiente mérito para que lo a-cojamos en esta tierra de rostros por mitras enmascarados que, siendo del mismo bando del embajador, quieren pasar como sacrosantos machos…
¿Verdad amigo Cedano, qué no es bueno hablar de soga en casa del “ahorcao” o, con el estómago “pegao” de filete en Guachupita?
Monseñor Cedano, sinceramente, no creerá usted que “ceder el ano” es ilegal. Acaso no dice la Constitución que: El uso correcto del recto es cuestión personal y no del debate obispal que en todo se mete y opina.
Toda la confusión ha venido porque el Estado y la Iglesia se ha creído que somos un Estado Clerical y no Aconfesional como dice la Constitución que a todos nos rige y manda.
Es peligroso el gringuito… y la Iglesia tiene el temor de que el líder embajador ejerza su influencia y destape a sus curas gays. Ya los veremos yendo al parque Colón a reclamarle al cardenal que los deje pajarear tranquilos. Total, no dice el Padre Alberto Cutie que si sacan a los curas gays se queda en quiebra la Iglesia pues más del 60% son plomeros, coprólogos expertos o culinarios meticulosos.
Todo es confusión. Hasta se comenta que el papa Francisco se lo pidió a Obama: “Nómbreme su embajador gay para joder a los curas pedófilos que mantienen en zozobra a todos los monaguillos y mandando a los jovencitos a que le toquen las campanas, sabiendo que son chiquillos”.
Con este despliegue de moralidad parece que la Iglesia fundará un “Observatorio Meticuloso” para de ahora en adelante revisarle el tabernáculo a todo emisario, nuncio o embajador aunque venga del Vaticano para saber con precisión el uso que le darán al ano.
¿La técnica? Inventariarles los pliegues anales que van desapareciendo a medida que el pájaro ajeno les lija el ano o el recto.
En su defecto, usar el “Balistico” método que estudia las estrías que, como huellas digitales, le deja marcado el cañón a la bala que sale del recto. Así se podrá examinar cualquier duro ejemplar procedente de algún estreñido que coma plátanos verdes y limones exprimidos. Muy sencillo: A más estrías menos uso y viceversa.
Se podrá así, en los sagrados conventos, determinar con toda precisión quienes macan almohadas y quienes soplan cocotes…conocerán así las millas que han recorrido estos clérigos de Dios en sus peregrinaciones postreras.
En cuánto a qué el designado embajador "está lejos de nuestra realidad cultural" monseñor Cedano nos miente tajantemente, pues él, mejor que nadie, sabe que en este país está el pájaro ñango, especialmente en su Iglesia, de la que el papa dice es un Lobby Gay, un culinario relajo.
En fin amigo Cedano, le recomiendo que no le coja con el pulcro ano del EMBAJADOR porque es muy amigo de Obama, suéltele el culo al señor y manténgase tranquilo… métase con los colegas gays que bastantes anos han jodido.
En cuanto a “Ceder el ano”: le aclaro a monseñor Cedano que a nosotros no nos interesa saber si lo cede, lo da o lo presta.
PD: Aquí le entrego el opúsculo que escribió el embajador sobre “Los derechos del ano”…sobre su uso discreto y las buenas costumbres, para que se mantenga enterado y guarde su retaguardia, pues por lo que dice el Padre Alberto, si sigue dando la misa le van a dar por el… Y dígale al carde que lo mandó a murmurar, que esto de la libertad del ano es de alta política y, como dijo nuestro Paco Escribano, si le coge con estos gringos le van a romper el…