REDACCIÓN ACENTO.COM.DO-La corporación minera transnacional Barrick Gold tendrá un nuevo presidente, según reveló el fundador de la empresa Peter Munk.

El dato se encuentra en una información de Alistair MacDonald, que escribe para The Wall Street Journal y otros medios dedicados a la información sobre el mundo de las finanzas y los negocios.

Bajo el título “Barrick Gold busca un sucesor”, Alistair MacDonald explica que el empresario canadiense con una larga historia, Peter Munk, indicó que está buscando pasar el cetro de Barrick Gold Corporation, el gigante de la minería aurífera, que fundó hace unos 30 años.

Detalla que en una carta a los accionistas, Munk, quien actualmente es copresidente, dijo que es apropiado que la empresa considere un “nuevo camino hacia un nuevo liderazgo” de su junta directiva.

El periodista explica que el llamado de Munk  se produce en medio de una conmoción en las filas superiores de la industria minera, donde una serie de líderes de alto perfil han renunciado, o se han reemplazado, en medio de las revueltas de accionistas por adquisiciones sobrevaloradas y deficientes resultados en los precios de las acciones en general.

“El precio de las acciones de Barrick se ha reducido más del 45% desde su pico en noviembre de 2011 y 17%, solo en este año. Esto es ligeramente menor que la disminución de casi el 20% del índice de referencia del sector, el Market Vectors Gold Miners ETF”

“A Munk, de 85 años de edad, se le atribuye la creación de la minera de oro más grande del mundo a partir de cero, mediante una serie de adquisiciones agresivas. Sin embargo, Barrick, con sede en Toronto, ha enfrentado la insatisfacción de sus propios inversionistas”,  subraya.

“Peter ha sido un administrador fuerte para esa compañía durante años, pero es necesario un nuevo cambio”, dijo Barry Schwartz, gerente de cartera de Baskin Financial, en Toronto. “Hagan lo que hagan, no está funcionando. El precio de las acciones está horrible”, agregó.

Munk dijo en su carta, que fue incluida en el informe anual de la compañía, que “quedarse parados y perpetuar el statu quo no es una opción”.

No obstante, no dio ninguna indicación en cuanto a cuándo tendría lugar el traspaso, aunque señaló que su vicepresidente John Thornton será su probable sucesor.

“De hecho, tenemos la gran fortuna de que John ha llegado a un punto en su carrera espectacular, al mismo tiempo que nuestra necesidad de que alguien con sus cualificaciones excepcionales, sus credenciales y experiencia, también llegaron a un punto decisivo”, dijo el Sr. Munk.

Thornton, ex presidente de Goldman Sachs, se convirtió en vicepresidente de Barrick en junio de 2012, un nombramiento que fue visto por los analistas como una señal de que Munk estaba aflojando su agarre firme de la empresa.

Munk ha ido vendiendo poco a poco su participación en Barrick, y actualmente posee alrededor del 0,3% de las acciones.

“Como figura bien conocida de los negocios en Toronto, Munk participó en una serie de empresas a lo largo de una carrera de 60 años que incluye la fabricación de equipos de alta fidelidad, complejos hoteleros y grandes intereses inmobiliarios”, explica MacDonald.

Resalta que en 1983, Barrick compró participación en dos pequeñas minas de oro de Canadá, lo que comenzó una serie de adquisiciones durante tres décadas, que llevaría a la creación de la mayor minera de oro del mundo, por producción y capitalización bursátil.

“Con un portafolio que ahora incluye 27 minas en los cinco continentes, la construcción del imperio está siendo interrumpida”, precisa.

Agrega que el año pasado, la empresa sustituyó al entonces presidente ejecutivo, Aaron Regent, y anunció un nuevo enfoque por el cual se venderían activos de bajo rendimiento o menor duración para concentrarse en los rendimientos de los inversionistas.

“Los inversores se han vuelto cada vez más impacientes con todas las compañías de oro, en la medida en que altos costos de producción, precios más bajos de los productos básicos y adquisiciones mal programadas hacen bajar los precios accionarios”, afirma.

Recuerda que en el cuarto trimestre, Barrick registró un cargo por deterioro de US$3,8 mil millones atado a una mina que compró en el 2011, la adquisición de Equinox Minerals.

Explica que la compañía también ha sufrido retrasos y un costo importante en su buque insignia, la mina Pascua-Lama, en la frontera de Chile y Argentina.

“El precio de las acciones de Barrick se ha reducido más del 45% desde su pico en noviembre de 2011 y 17%, solo en este año. Esto es ligeramente menor que la disminución de casi el 20% del índice de referencia del sector, el Market Vectors Gold Miners ETF”,  detalla MacDonald.