Yakarta, 28 jun (EFE).- Las autoridades indonesias afirman que las labores destinadas a extinguir los incendios que azotan la isla de Sumatra y cuyo humos contaminantes han causado problemas de salud en Malasia, Singapur e Indonesia podrían alargarse más de un mes, publican hoy los medios locales.

Al menos 2.000 hectáreas de bosque ya han sido quemadas y decenas de focos siguen ardiendo sin control, según las autoridades forestales de la provincia de Riau, en la isla de Sumatra.

El Ejecutivo indonesio informó la pasada noche del envío de 1.000 marines para reforzar y coordinar las unidades aéreas y terrestres ya movilizadas en la zona que intentan controlar y mitigar los fuegos situados a unos 100 y 300 kilómetros de distancia de Singapur y Kuala Lumpur, respectivamente.

Las nubes de humo y ceniza procedente de los incendios ha cubierto el cielo de Singapur y parte de Malasia durante casi una semana, aunque la situación ha mejorado parcialmente con la llegada de las lluvias monzónicas.

Una persona, residente de la ciudad malasia de Muar, donde el pasado domingo las autoridades malasias declararon el estado de emergencia junto a la población de Ledang, falleció por causas relacionadas con la exposición a la contaminación del aire.

La Policía indonesia ha detenido a ocho personas involucradas en la propagación de los incendios en las plantaciones de la provincia de Riau, e investiga a ocho grandes corporaciones por su posible responsabilidad en los fuegos.

Los ecologistas denuncian que cientos de frentes fueron prendidos intencionadamente con el fin de robarle tierra cultivable a los bosques.

Cada año tienen lugar fuegos intencionados en las islas indonesias de Sumatra y Borneo, con grandes extensiones de bosque, una práctica que los dueños de plantaciones utilizan como método barato para limpiar sus terrenos o ganar terrenos para plantaciones. EFE

parencia de la información sobre las emisiones y alentará a los armadores a reducirlas", explicó la comisaria danesa en el comunicado.

"Reconocemos que el transporte marítimo debe contribuir al esfuerzo de reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero, preferentemente a través de medidas de alcance mundial", valoró por su parte el responsable comunitario de Transporte y Movilidad, Siim Kallas.

La CE espera también que estas medidas sirvan de base para desarrollar un sistema mundial de eficiencia energética para los buques existentes, algo que también persigue Estados Unidos, que cuenta con el apoyo de otros países de la Organización Marítima Internacional (OMI).

Según el comunicado del Ejecutivo comunitario, si ese sistema mundial llegara a desarrollarse, la UE se adaptaría a las medidas que planteara.

La estrategia presentada hoy por la CE deberá recibir la aprobación del Consejo y del Parlamento Europeos para entrar en vigor. EFE