Animadoras norcoreanas en China.

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Las animadoras norcoreanas estarán en los Juegos Olímpicos de Invierno que se celebrarán en Corea del Sur.

Corea del Norte estará en los Juegos Olímpicos de Invierno que se celebrarán en su vecino del sur. Y lo hará con atletas, artistas, funcionarios, hinchas, reporteros… y su exclusivo equipo de animadoras.

Pyongyang lo anunció el martes durante la histórica reunión de deshielo que celebraron ambas Coreas, tras un año marcado por las tensiones y tan sólo semanas después de la peculiar batalla dialéctica entre Kim Jong-un y Donald Trump sobre el tamaño de sus "botones" nucleares.

Pese a que probablemente un equipo de animadoras no sea lo primero que se viene a la cabeza al pensar en Corea del Norte, este conjunto de jóvenes mujeres ha jugado un destacado rol en la escena política de la nación asiática durante años.

Su apariencia y su sincronización en la pista despiertan pasiones en Corea del Sur y Pyongyang ha aprovechado su dulce imagen para tratar de destensar la relación con su vecino y mostrar su cara más amable.

Jóvenes "bellas" y afines al régimen

El equipo está formado por mujeres de entre 20 y 25 años de edad, según el director surcoreano del organismo encargado de los intercambios deportivos entre las dos Coreas, Kim Gyeong-sung.

Todas son elegidas "por su apariencia", pero también por su "ideología", es decir, por su lealtad al régimen, apuntó Kim al diario The Korea Times.

Arirang

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Las animadoras norcoreanas son parte del famoso festival Arirang.

Las candidatas suelen ser universitarias, miembros de la propaganda norcoreana o estudiantes de música, indica la Radio Internacional de China.

Antes de ser seleccionadas, las autoridades revisan sus antecedentes, pues "un buen historial familiar es clave" para formar parte de este grupo, remarca el medio chino.

Algunas de ellas son hijas de altos funcionarios, aunque no todas, y aquellas relacionadas con desertores o ciudadanos projaponeses son directamente excluidas.

Entretenimiento de masas

El conjunto está acostumbrado a deleitar a las multitudes norcoreanas con sus coreografías.

Una de las citas más importantes en la que siempre participan es el festival norcoreano Arirang, el evento de masas famoso por sus espectaculares mosaicos humanos.

En ocasiones, también acompañan a atletas del país en sus viajes al extranjero.

En 2007, por ejemplo, fueron enviadas a China para el Mundial de Fútbol femenino que la FIFA celebró en la ciudad de Wuhan.

animadoras norcoreanas.

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Las porristas son elegidas por su apariencia y su ideología.

No obstante, sus apariciones en Corea del Sur, con quien Corea del Norte sigue técnicamente en guerra, están estrictamente controladas.

Desde el comienzo de la Guerra de Corea, sólo han sido enviadas a ese país en tres ocasiones, con el objetivo de aliviar las tensiones con sus bailes y sus canciones de reconciliación.


VISITAS DEL "EQUIPO DE LA BELLEZA" A COREA DEL SUR

  • En 2002, 288 animadoras asistieron a los Juegos Asiáticos en Busan
  • En 2003, un equipo de 303 porristas acompañó a atletas a los Juegos Universitarios de Verano de Daegu
  • Y en 2005, un centenar de porristas fueron enviadas al Campeonato Asiático de Atletismo en Incheon

En 2014, Corea del Norte también se mostró dispuesta a enviar a sus animadoras al sur para participar en los Juegos Asiáticos, pero la iniciativa no prosperó.

"Decidimos enviar un equipo de animadoras junto a los atletas (…) para mejorar la relación entre el norte y el sur y crear una atmósfera de reconciliación", anunció entonces Pyongyang, poco antes de echarse atrás por la falta de acuerdo en cuanto a quién se ocuparía de los gastos y otras cuestiones.

La animadora más famosa

Su perfeccionado estilo y su dulce apariencia les han ganado muchos seguidores en Corea del Sur.

Allí, los medios les llegaron a apodar el "equipo de la belleza" e incluso acapararon mayor atención que los propios atletas.

Entre todas, hay una animadora que destaca especialmente: Ri Sol-ju, la actual primera dama de Corea del Norte.

Pese a que se conoce poco sobre su vida, los observadores de la política norcoreana aseguran que Ri formó parte del exclusivo club de animadoras del país antes de contraer matrimonio con el líder Kim Jong-un.

Una de las pruebas que apuntan a ello es una fotografía tomada en Corea del Sur en 2005, en la que Ri aparece como parte del equipo nacional durante el Campeonato Asiático de Atletismo.

Ri Sol-ju

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Ri Sol-ju formó parte de la delegación de animadoras que Corea del Norte envió a Corea del Sur en 2005.

La primera dama comenzó a aparecer en los medios en el verano de 2012 y poco después los medios oficialistas confirmaron que era la esposa del líder norcoreano.

Antes de ello, su vida es una incógnita.

Incluso se desconoce su edad exacta, como ocurre con el actual líder norcoreano.

Líder norcoreano y su esposa

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Poco se conoce de cómo o cuándo el líder norcoreano conoció a su actual esposa.

Un gesto conciliador

Que Corea del Norte envíe a Corea del Sur a su equipo de animadoras por primera vez en 10 años es visto como un gesto conciliador.

Además, los analistas lo consideran como un intento de aumentar su presencia en la competición, pues sólo tiene dos atletas clasificados.

"Para que Corea del Norte consiga los efectos deseados y atraiga la atención, tendrá que desplegar su equipo de la belleza", señalaba de forma previa al anuncio An Chan-Il, un desertor que se convirtió en investigador y ahora dirige el Instituto Mundial de Estudios Norcoreanos, a la agencia AFP.

El "ramo de olivo" de Pyongyang frena una etapa de crecientes tensiones en la península coreana.

2017, un año de amenazas

Las continuas pruebas con misiles balísticos y armas nucleares del régimen norcoreano provocaron en 2017 nuevas sanciones contra el país por parte de la ONU y serias amenazas de Estados Unidos.

Washington llegó a sugerir que podría optar por la opción militar para frenar el desafío norcoreano, ante la resistencia de Kim Jong-un a frenar su programa nuclear.

Trump y Kim Jong-un.

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Trump y Kim Jong-un se enzarzaron este año en una batalla dialéctica.

En este contexto, tener a una multitud vitoreando a un equipo de animadoras norcoreanas puede ser bueno para mejorar la imagen global del aislado país.

O que éstas acaben compartiendo escenario con las "cheerleaders" estadounidenses, que ya han confirmado su asistencia.

Pero no sólo Corea del Norte tiene algo que ganar.

A los organizadores de los Juegos Olímpicos de Invierno les está costando vender entradas para el evento, quizá debido a las tensiones y al hecho de que Corea del Norte esté a tan sólo 90 kilómetros del enclave donde se celebrará la competición.

Así que esta nueva diplomacia del deporte puede ser justamente lo que ambos necesitan.